jueves, 21 de enero de 2016

Cómo no escribir guiones: La olla delatora




Pues aquí está mi ópera prima, un corto, siendo directo y franco: Mon script est légèrement une histoire de merde. Eso, es ligeramente una historia de mierda pero no me revuelco en la escatología, no quería un capítulo de Shin Chan (odio Shin Chan). Me gusta decir que está inspirada en "El corazón delator" de Edgar Allan Poe pero es para vender un poco la moto. 
La verdad es que la trama está basada en una historia real, que pasó, no una, sino dos veces en Galicia. El relato se aleja mucho de los hechos que acontecieron en la realidad y resulta hasta cándido. Lo que aquí, en la teoría, queda en intento; en el mundo real, en la práctica, llegó a cocinarse.
El corto gira en torno a la locura transitoria con toques de humor grotesco similares a detalles de por ejemplo Criadas y Señoras (The Help, 2011). Podríamos ubicarlo en el género de la comedia negra con un final que homenajea el slapstick. El personaje principal sufre de nervios y ataques de pánico por lo que él mismo es su principal antagonista y por mucho que intente escapar los problemas siempre le perseguirán. 


Busco financiación, gracias de antetomic.






La olla delatora


Escrito por Daniel Veira Ferrín

Dedicado a John Papas y a John Balaustrada





Versión 01
11/12/15


01.01. Salón. Int. Noche. Día 1.
Roberto, Hilario, Federica
Roberto, Hilario y Federica; tres jóvenes veinteañeros amigos de la universidad; están en el salón tomando unas copas y chupitos. Están todos bastante borrachos.


Los tres se ponen de pie y brindan. Se vuelven a sentar





Todos se ríen y se quedan callados. De repente, Hilario se levanta decidido, aunque no es capaz de caminar recto, sale del salón y se va la cocina. Aparece de nuevo al poco rato con una olla, cruza el salón y entra en otra habitación que es el baño.



Hilario vuelve al salón y les muestra el contenido de la olla a sus amigos. Solo vemos las caras de Roberto y Federica. Sienten a la vez asco pero les hace gracia. Se ríen todos.

Roberto se levanta, se despide de sus amigos y se va a su habitación. Hilario y Carmen se quedan bebiendo un rato más.


Hilario y Federica recogen más o menos el salón y se llevan la olla a la cocina para fregarlo todo.
01.02. cocina. int. NOCHE. DÍA 1.
Hilario, Federica
Hilario y Federica limpian en el vertedero la olla y el resto de vasos que usaron para beber.


La pareja se da un beso y se marcha a dormir a su habitación.

01.03. dormitorio. int. día. día 2.
Roberto
Roberto duerme en su habitación profundamente, por la luz que entra por las ventanas se sabe que ya es de día.



01.04. cocina. int. día. día 2.
Hilario, Federica
Hilario y Federica cocinan perritos calientes chili dog mientras esperan a que lleguen sus invitados y se despierte Roberto.


01.05. entrada. int. día. día 2.
Hilario, Alonso, Carmen, Jacinta
Hilario abre la puerta donde están Alonso, Carmen y Jacinta. Los tres también tienen alrededor de 25 años. Jacinta es una amiga de Carmen que no estaba previsto que fuese. Alonso trae consigo un plato con comida dentro de una bolsa y Jacinta lleva una cesta con algo que cocinó ella.



Hilario y Jacinta se dan dos besos.


Se van hacia la cocina.


01.06. cocina. int. día. día 2.
Hilario, Federica, Alonso, Carmen, Jacinta
Los recién llegados saludan a Federica y dejan la comida sobre la mesa fuera de los envoltorios. Alonso y Carmen prepararon unos filetes Stroganoff con mucha salsa y Jacinta lleva unas trufas y un cuenco con mousse de chocolate.




Federica e Hilario se ríen.


Federica pone el resto de platos sobre la mesa y se sientan todos. Solo falta Roberto.


01.07. dormitorio. int. día. día 2.
Roberto
Roberto aun vestido con la ropa de ayer escucha los gritos y se levanta de la cama muy despeinado. Está muy confundido y tiene mucha resaca. Sale de la habitación.


01.08. cocina. int. día. día 2.
Hilario, Federica, Alonso, Carmen, Jacinta, Roberto
Roberto, con aspecto de zombie, entra en la cocina en donde ya están todos sentados a la mesa. Sus ojos se clavan en Jacinta, que no conocía y se enamora perdidamente de ella.



Roberto busca con la mirada los ojos de Hilario y Jacinta, teme que hayan llevado a cabo su plan malvado. No quiere que Jacinta se entere de lo que pretendían hacer.
Busca la olla por la cocina y al no encontrarla y al ver el aspecto de la comida sobre la mesa entra en pánico.
Hilario levanta la bandeja de filetes y se la acerca a Jacinta.


Roberto piensa que la trampa está en los filetes y pierde la cabeza, agarra la bandeja y tira el contenido por la ventana.
Ante la mirada perpleja del resto se da cuenta que la situación no tiene vuelta atrás. Roberto grita guturalmente.



Entra en su (supuestamente superado)estado de locura transitoria y en un arrebato coge la bandeja con los perritos y se los lleva a otra habitación para deshacerse de ellos.
Hilario se levanta y va tras su amigo para calmarlo pero no le da tiempo ya que Roberto vuelve como el diablo a la cocina sin los perritos.


En un último intento para destruir lo que queda, las trufas y la mousse de Jacinta, Roberto empuja a Hilario y se tira sobre la mesa y hace la croqueta.
La cocina es un desastre.Alonso, Carmen, Federica y Jacinta se apartan de la mesa. Entre Hilario y Federica levantan a Roberto que se pone a llorar en el suelo.